De qué está hecha una Guitarra Eléctrica
Qué es lo que hace que una guitarra eléctrica sea tan versátil y codiciada, en este artículo te contamos de qué está hecha.
Desde a principios del siglo 20 los guitarristas han buscado la manera de poder sonar más alto en las grandes bandas. Han ido experimentando una y otra vez con la mejor forma de hacerlo hasta dar con la clave para lograrlo. Por fin implementaron los primeros instrumentos electrificados. La guitarra eléctrica se ha convertido en una de las piezas angulares de la música moderna.
Pero, de qué está hecha una guitarra eléctrica, para ser uno de los instrumentos más buscados hoy en día.
Lo primero que hay que decir es que las guitarras clásicas y acústicas dependen de su caja de resonancia para poder proyectar el sonido. Mientras que las guitarras eléctricas son en general macizas. Así que no dependen de su propia acústica. Son capaces de captar la vibración de las cuerdas mediante sus fonocaptores o pastillas y llevarla a un sistema de amplificación para reproducir su sonido y donde el limite de volumen, sonidos y texturas es virtualmente inexistente.
Las guitarras eléctricas están hechas para poder ser tocadas como cualquier guitarra clásica, pero pensadas para explorar y experimentar con cualquier tipo de sonido.
Cuando nos planteamos de qué esta hecha una guitarra eléctrica, podemos dividir su estructura en tres partes principales:
El Cuerpo
Normalmente esta hecho de madera. Aunque, en algunas ocasiones, se utiliza material sintético plástico o incluso aleaciones de aluminio.
Aquí es donde se aloja toda la electrónica de la guitarra. Dependiendo del tipo de material que se use, tendrá más o menos sustain, o será más brillante u opaco su sonido.
El Mástil
Hecho de varias piezas, en su interior alberga una barra de metal muy resistente llamada alma. Su función es la de contrarrestar la tensión de las cuerdas para mantenerlo recto.
Suele estar construido en madera, y es donde se fija el diapasón. Aquí es donde se ponen los dedos al tocar. Suele estar hecho de palo rosa, ébano o incluso de grafito, y al que se añaden pequeñas barras metálicas llamadas trastes.
El Clavijero
Es el extremo del mástil, la pala, donde se alojan las clavijas, que son las que permiten tensar o destensar las cuerdas.
Desde aquí podemos controlar la afinación de nuestra guitarra.
Cómo logra una guitarra eléctrica esa variedad de sonidos.
Teniendo en cuenta que la forma en la que está hecha una guitarra eléctrica persigue un objetivo que va más allá de las guitarras tradicionales, podemos decir que cada parte que conforma el instrumento influye en el resultado final.
Si nos fijamos en el tipo de madera, nos encontraremos con que dependiendo de la variedad (arce, caoba, aliso, etc.), tendremos un sonido más brillante y vivo, o más oscuro y denso. Además de que el sustain variará dependiendo de la densidad del material.
El puente nos ofrece otro punto de inflexión a la hora de definir el sonido de una guitarra en particular. Desde un puente fijo o un vibrato como los de las Fender Stratocaster, hasta puentes flotantes como el Floyd Rose. Éstos nos permiten hacer variaciones dramáticas de tensión, generando efectos muy usados en la música moderna.
Las pastillas son uno de los puntos clave a la hora de ver de qué está hecha una guitarra eléctrica.
Las pastillas, son las que en última instancia captarán toda la esencia de la guitarra, si buscamos un sonido más clásico y limpio, los Single coils (pastillas simples), nos ofrecen un menor grado de saturación, entregándonos un sonido que interactúa con la madera y nos entrega un registro rico en brillo y armónicos.
Por otra parte, tenemos los Hambuckers (Pastillas Dobles), que nos dan un sonido con mayor saturación, ideal para sonidos más distorsionados pero manteniendo la riqueza en armónicos.
También se caracterizan por ser menos ruidosas que las pastillas simples.
Tenemos también las pastillas activas.
Requieren de una alimentación eléctrica mediante una batería para funcionar. Este tipo de pastillas apenas tiene interacción con la madera, y entrega un sonido mucho más lineal y «frio». Ideal para quien disfruta de las distorsiones más extremas.
El mástil: el alma de la guitarra eléctrica.
Como mencionábamos antes, el mástil implica varias partes clave en la forma en que está hecha una guitarra eléctrica. Es el alma del instrumento. Aquí es donde vamos a poner los dedos para hacer las escalas o los acordes, y es donde nos sentiremos más o menos cómodos al tocar.
Podemos decantarnos por un mástil más grueso y redondeado tipo Gibson, o buscar los mástiles planos diseñados para volar por el diapasón como las RG de Ibanez.
También podemos ir a por una madera como el ébano, que aparte de elegancia, dota al diapasón de una dureza increíble, haciéndolo firme y duradero.
Además podemos ir de los 21 trastes de una Fender hasta los 24 (incluso más) de las guitarras más rockeras, pensados para poder llegar a las notas más agudas.
El mástil puede ir atornillado como en las Fender, encolado como en las Gibson LP o a través del cuerpo (Neck through) donde el mástil es una sola pieza de arriba abajo, a la que se ensamblan los laterales del cuerpo.
En todos los casos tendremos variaciones en el sustain que ofrece la guitarra.
La pala o Clavijero, total control tonal.
Si nos planteamos de qué está hecha una guitarra eléctrica, el clavijero sería la llave. El control tonal de nuestro instrumento. Eesde aquí podremos controlar y variar nuestra afinación, sea estándar o alternativa.
Encontraremos desde clavijeros clásicos con perillas de nácar o bloqueos para mantener las afinaciones, hasta clavijas que permiten bajar la tonalidad de una cuerda de manera automática y recuperar la afinación que tenían con un solo toque.
Podemos encontrar las típicas 6 clavijas pasando por 7 u 8 para las guitarras que buscan llevar el grave a su máxima expresión, creando casi un híbrido de guitarra y bajo.
Ahora que ya sabemos de qué está hecha una guitarra eléctrica, que nos espera.
Combinando estos elementos que conforman nuestra guitarra, y dado que la señal la enviaremos a un amplificador, podemos añadir cualquier tipo de efecto.
Distorsiones, delays, moduladores como chorus o flangers, incluso, usando pastillas especiales midi, podemos utilizarla como un sintetizador, logrando sonidos de cuerdas, pianos y un interminable etcétera.
En resumen, saber de que está hecha una guitarra eléctrica, nos permite saber hasta donde podemos llegar con ella,
Podemos buscar la guitarra adecuada para simplemente tocar y sacar los sonidos más cercanos a la guitarra tradicional, o buscar el instrumento que nos permita llegar a niveles extremos, ya sea en distorsión, efectos o sintetizadores.
Y recuerda, con una guitarra eléctrica en tus manos, no existen limites.
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